Deconstruir, construir: la impostergable tarea de seguir defendiendo el derecho a vivir libres de violencias

En el marco del 25 de noviembre, “Día Internacional para la Eliminación de Violencia contra las Mujeres”, el Grupo Derecho y Género de la Facultad de Derecho, Universidad de la República, reafirma su compromiso por la igualdad de género, la defensa de los derechos humanos de todas las mujeres y especialmente el derecho a vivir libres de violencias.

En nuestro país, ocho de cada diez mujeres mayores de 15 años de edad han vivido situaciones de violencia basada en género1, lo que evidencia que estamos ante un problema endémico, que excede la responsabilidad individual de quien violenta. Es necesario reconocer que cuando hay violencia contra la mujer basada en su género hay un problema social, no solo individual; que es urgente avanzar en la deconstrucción de mandatos machistas y patriarcales así como del sistema que permite y alimenta todas las violencias machistas.

La violencia contra las mujeres basada en su género es una forma de discriminación y violación de los derechos humanos y las libertades fundamentales de las mujeres y tiene sus raíces en la desigualdad histórica de las relaciones sociales de dominación masculina y subordinación femenina; en la construcción de identidades de género desiguales; en la división sexual del trabajo y en la persistencia de relaciones patriarcales en la esfera familiar.

Reconocemos el camino recorrido por nuestro país para garantizar el derecho de las mujeres que habitamos Uruguay a vivir sin violencias. No obstante, es necesario fortalecer el sistema de respuesta ante las violencias que vivimos las mujeres por razones de género; evitar la revictimización de las denunciantes y la relativización de las denuncias, entre otras prácticas dañinas.

El efectivo goce de los derechos reconocidos exige que el Estado en su conjunto, garantice la igualdad de género y brinde capacitación género-sensitiva a todas las personas que inciden y deciden en los procesos judiciales; y que esta capacitación sea permanente, no espasmódica. Una valoración de los hechos y de los medios de prueba sin aplicar la perspectiva de género, reproduce estereotipos y, en consecuencia, impide un efectivo acceso a la justicia.

Este 25 de noviembre nos recuerda que no estamos todas. Nos faltan las víctimas del feminicidio en nuestro país. También nos recuerda a toda la comunidad universitaria de la Udelar la necesidad de permear nuestras currículas; la investigación y extensión con la perspectiva de género; de educar sin prejuicios ni estereotipos hacía las mujeres; de garantizar una vida libre de violencia para las estudiantes, las docentes, las funcionarias y todas las mujeres que forman parte de nuestra comunidad universitaria.

En este día, reafirmamos nuestro compromiso por seguir trabajando para que el derecho a vivir libres de violencia sea una realidad. Por esta razón, es una responsabilidad del Estado adoptar medidas adecuadas para su erradicación; incluyendo la implementación de políticas públicas que tiendan a deconstruir los mandatos patriarcales que la sostienen, tanto a nivel institucional como socio-cultural.


1 INE, Encuesta Nacional de Prevalencia de Violencia Basada en Género y Generaciones (2019). Disponible en https://www.ine.gub.uy/evbgg-2019